Esta localidad se encuentra en el área centro-occidental del Valle, equidistante entre dos arroyos subsidiarios del Ebro, al S de un cerro testigo conocido como Peña del Águila que es una estribación de la Sierra de Arcena. Desde el emplazamiento en altura en que se ubica se tiene un amplio dominio visual del E del valle y la localidad de Frías.

El acceso a la misma se realiza por la carretera que une Quintana Martín Galíndez con Hedeso ya que dicha carretera atraviesa la localidad. Su reducido casco urbano se dispone de E a O especialmente al O de la carretera.

El pueblo aparece citado en el año 872 y al parecer debe su nombre a un propietario romano llamado Cormentius.

El núcleo urbano cuenta con alguna casa solariega construida en los siglos XIX y XX, con estructura de madera y mampostería de arenisca y sillares en las esquinas, generalmente de dos o tres plantas, con la balconada o solana de madera en la última planta y orientada al naciente o mediodía -elemento típico de influencia de norteña, de la casa montañesa o cántabra y del caserío vasco-. Existe un segundo grupo de casas de tradición norteña formado por aquellas que presentan algunas reformas recientes que han alterado ligeramente su morfología tradicional.

Al N de la localidad nos encontramos con monte encina y sotobosque y el espacio de valle está dedicado al cultivo de corte cerealista

La iglesia está dedicada a San Antón y la puerta de ingreso es de arco apuntado. El altar se halla pegante a otros dos y a mucha elevación y hoy carece de imágenes; su Virgen gótica, antigua patrona, preside hoy el retablo mayor de Quintana.